Por L. Sukolowsky, G. Pellizzari, R. Gonzalo, J. Córdoba y A. Fojo
En la Argentina, su nombre es sinónimo de derechos humanos. En 1980, fue galardonado con el Premio Nobel de la Paz por su constante denuncia de los crímenes de la última dictadura militar. Adolfo Pérez Esquivel recibió a Diario Publicable en su oficina de SERPAJ (Servicio, Paz y Justicia), la entidad que preside y desde donde sigue velando por el respeto a la dignidad de todas las personas.
Sin guardarse nada, reflexionó sobre la relevancia de aquel momento histórico, 30 años después. Criticó al gobierno de Raúl Alfonsín, al fiscal Strassera por haberlo excluido de la larga lista de testigos y explicó los motivos por los que rechazó integrar la CONADEP.
Cronista: Giuliana Pellizzari y Rosario Gonzalo / Cámara: Astrid Fojo / Producción: Ludmila Sukolovsky y Julia Córdoba
