Por Adriana Ramirez @ADRISSCRA

En marzo de 2017, el juez Claudio Bonadío ordenó el procesamiento de todos los imputados en la denominada causa Dólar Futuro por el delito de “defraudación a la administración pública”Alejandro Vanoli, titular del Banco Central de la República Argentina (BCRA) entre 2014 y 2015, encabeza la lista de quienes serán llevados a juicio oral en 2018, junto con la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, el exministro de Economía Axel Kicillof, el exvicepresidente de la entidad Miguel Ángel Pesce y todos los miembros que integraron el directorio del banco durante ese período. 

En la siguiente entrevista con Diario Publicable, Vanoli analiza la actuación del juez Bonadío durante la investigación y las debilidades de la denuncia presentada por los legisladores Mario Negri y Federico Pinedo del bloque de Cambiemos, que dio origen a la causa.

-¿Considera que esta causa fue utilizada por el Gobierno para obtener beneficios y así distraer a la sociedad de la realidad política que atraviesa actualmente? 

-En términos generales, yo creo que al gobierno actual le sirve instalar, con la ayuda de los grandes medios, la idea de que todo el gobierno anterior fue corrupto y que eso fue lo que lo marcó. Es una forma de tapar una situación económica que es cada vez peor y que tiene que ver precisamente con las políticas que están implementando.

-¿Cómo analiza la denuncia que impulsaron Federico Pinedo y Mario Negri, del bloque Cambiemos?

Es una causa absolutamente política sin lugar a dudas, porque el procesamiento se hizo sin ninguna prueba, sin haber escuchado a ninguno de los testigos que propusimos. Es decir, nosotros en el BCRA tomamos decisiones de política económica que se pueden o no compartir. Acá no hay ninguna acusación de corrupción, sino que simplemente hay un cuestionamiento a la política económica.  

-¿Quiénes fueron, a su juicio, los principales beneficiarios de la compra de dólar futuro?

-En primer lugar, los que se beneficiaron son los funcionarios del actual gobierno, por lo que devaluaron y por las posiciones que tenían con los contratos a futuro. Corrupción hay en todos los gobiernos y eso todo el mundo lo sabe, pero ahora hay precisamente un intento de establecer la idea de que el anterior gobierno era todo corrupto, y también quieren imputar a todos los funcionarios en una actitud de persecución con fines políticos.

-¿Desde su punto de vista, cometió errores el juez Bonadío durante la instrucción?

-Los errores fueron muy evidentes. El juez solamente escuchó los argumentos de testigos muy enfrentados con el gobierno anterior, como por ejemplo cuando llamó a declarar a Redrado y a Prat-Gay que eran ex presidentes del BCRA. Prat-Gay terminó siendo el ministro del nuevo gobierno y tuvo una motivación política para impulsar esta denuncia. No llamó a declarar a Mercedes Marcó del Pont, llamó sólo a testigos que de alguna manera iban a fortalecer la acusación. No llamó a varios testigos que nosotros habíamos pedido, como por ejemplo el ex gobernador Daniel Scioli. Por otro lado, hubo acusaciones sin pruebas.

-¿Cuál debía ser la función del BCRA en ese entonces? 

-La operatoria que hacía el BCRA no fue sólo de dos meses sino que es una operatoria de diez años y siempre se operó con el mismo criterio. Cuando se opera a futuro se está estableciendo una tasa de interés en la economía y en el marco de la carta orgánica. El BCRA tiene que cumplir con distintos objetivos, como la estabilidad monetaria, financiera, el crecimiento, el empleo y la inclusión social. Siempre fue así en los últimos diez años, incluso durante la presidencia de Martín Redrado, quien testificó en contra para tener algún beneficio político del nuevo gobierno de Cambiemos, cuando en todas las presidencias anteriores a las mías, siempre se operó con el mismo criterio, es decir fijar una tasa de interés. El juez entendía que la tasa de interés tenía que ser la del dólar ilegal, pero esto es absurdo, porque el Estado tiene que fijar políticas para estabilizar y cumplir con la Carta Orgánica del BCRA.

-Usted aseguró que la política aplicada durante su gestión estaba basada principalmente en la Carta Orgánica. ¿En que se basó esa política y en qué se diferencia con la gestión de Cambiemos?

-Cuando yo asumí en el BCRA, la brecha entre el tipo de cambio oficial y el ilegal era el 100 por ciento. Si tenía que fijar una tasa de interés del 100 por ciento, esto hubiera generado una gran recesión y una gran inflación. Tampoco lo hizo mi antecesor Juan Carlos Fábrega: Todos fijaron tasas de interés que el Estado y el BCRA creían que eran buenos para generar estabilidad, promover crecimiento y evitar la inflación. Siempre se hizo así. Si yo hubiera hecho eso cuando asumí en el BCRA, de convalidar el tipo de cambio ilegal, hubiera generado todo lo mencionado anteriormente, que es todo lo que estamos viviendo ahora.

-En su libro “Patria o dólar” destaca el plan que se habría llevado a cabo si Daniel Scioli hubiera sido elegido presidente. ¿En que se basa ese plan y cuál sería la diferencia con los contratos a futuro?

-Una de las medidas que menciono en mi libro y que tenía prevista paraun eventual gobierno con Daniel Scioli, era tratar de que hubiera una convergencia gradual entre el dólar oficial y el ilegal y no hacer lo que hizo Macri, que fue sacar todos los controles financieros y generar una gran devaluación. Eso fue lo que finalmente terminó por generar una gran inflación y varios perjuicios a la economía del país.