Por Francisco Declich

El espectáculo “Música en total oscuridad” ofrece la oportunidad de escuchar un álbum de una forma no convencional. Los espectadores llegan a la sala, se sientan en sus butacas y después de una breve introducción se apagan las luces y la magia comienza. Junto con la oscuridad, los parlantes holofónicos creados por el argentino Hugo Zucarelli son los protagonistas de esta experiencia. Según Cristian Hohendahl, primo de Zucarelli e ingeniero de sonido, estas torres de cuatro metros brindan “una experiencia más natural, similar a usar unos auriculares de alta calidad, pero con la sensación de los graves vibrando en el cuerpo”. Al no separar la música en frecuencias -bajos, medios y agudos-, se reduce mucho la distorsión y, gracias a la membrana del parlante, la acústica de la sala tiene menos influencia. “Probablemente uno pueda escuchar el sonido arriba, abajo, a los costados e incluso detrás, aunque los parlantes estén ubicados sólo adelante”, explica Hohendahl.

El show lleva más de diez años en Buenos Aires, lo que demuestra que es mucho más que una moda pasajera. Las entradas se agotan cada fin de semana, especialmente cuando un artista lanza un nuevo álbum, ya que una comunidad melómana en crecimiento busca experimentar el sonido de la forma más pura posible. Pink Floyd, Daft Punk, Luis Alberto Spinetta, Charly García, Taylor Swift y The Beatles son algunas de las opciones más populares y todos los meses se realizan funciones con sus mejores obras.

Aunque el éxito del espectáculo haría posible una expansión, aprovechar al máximo los parlantes no es tan sencillo. Fernando Zucarelli, hijo de Hugo y organizador del espectáculo junto a sus dos hermanos, explica: “Se intentó llevar a Rosario, pero no funcionó debido a que el personal no estaba familiarizado con el sistema como nosotros y no pudieron alcanzar la calidad que buscábamos”. Como este sistema es tan distinto al sistema de sonido convencional, el manejo y el mantenimiento de los parlantes resultan complejos y costosos, además de las tediosas mediciones que deben realizarse en la sala para calibrar los equipos cuando se instalan.

Para lograr un crecimiento real, Zucarelli explica que necesitarían inversiones de terceros y algunas circunstancias específicas: “Si la gente queda encantada con lo que hacemos con mis hermanos, arreglándonos como podemos, casi de forma artesanal, imaginate si esto estuviese hecho a regla con un equipo y con libre importación, eso sería realmente otro nivel de sonido. Es lo que está tratando de lograr mi viejo desde que tiene 25 años. Hugo está ahora en Italia con la idea de poner una sala con nuevos parlantes allá, y si eso sale, podría expandirse un poco más. Yo veo que puede haber futuro para esto, hay que expandirlo para que llegue al mercado. Y si nunca se da, seguiremos así, artesanos, y tratando de poner teatros donde podamos.

Música en total oscuridad” se presenta de jueves a sábado en el espacio CENDAS, en Bulnes 1350. La cartelera cambia cada mes y puede consultarse en su cuenta de Instagram, @parlantesholofonicos.