Por Valentín Clinaz, Guido García, Luca Manessi, Iván Sierkovich y Laureano Novara
La decisión del Poder Ejecutivo de prorrogar el presupuesto 2023 “coloca a las universidades nacionales frente a una situación económica crítica”. El presupuesto actual es de 1.952 millones de pesos, que en valores reales significa una baja del 72 por ciento respecto de 2023, según se desprende del informe de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), que analizó con datos fehacientes el impacto de las medidas aplicadas por el gobierno de Javier Milei.
En el informe, al que tuvo acceso Diario Publicable, se analizan los datos relacionados con la ejecución presupuestaria del Sistema Universitario Nacional en el primer trimestre de 2024. Los expertos de ACIJ realizaron “un análisis detallado del presupuesto universitario desde 1997 hasta el primer trimestre del 2024”. Estos son los puntos centrales del informe:
● Sin una ampliación presupuestaria, este sería el nivel más bajo de financiación universitaria desde 1997.
● Para 2024, el presupuesto asignado al Programa Desarrollo de la Educación Superior (principal programa universitario) es un 72 por ciento más bajo que el del año anterior.
● La ejecución presupuestaria del primer trimestre refleja una reducción del 34 por ciento frente al mismo período de 2023.
● La caída interanual en la ejecución presupuestaria universitaria fue incluso más pronunciada que el promedio del gasto público nacional.
En la Argentina, el presupuesto destinado al sistema educativo superior está compuesto por distintas partidas, pero la principal es Desarrollo de la Educación Superior, que implica más del 90 por ciento del gasto total. Otros programas de menor peso son el de las Becas Progresar, Infraestructura universitaria y Evaluación y Acreditación Universitaria.
La decisión del Poder Ejecutivo de prorrogar el presupuesto del año anterior implica una reducción del 72 por ciento en términos reales para “Desarrollo de la Educación Superior”. De no haber modificaciones que amplíen los montos, este será el presupuesto universitario más bajo desde 1997, año a partir del cual se cuenta con datos del programa. Las becas destinadas a estudiantes de institutos superiores y universidades representan aproximadamente el 8,2 por ciento del presupuesto universitario nacional. El dato está ponderado de acuerdo con el promedio de becarios de educación superior.
Según las metas físicas incluidas dentro del Ministerio de Educación en la Ley de Presupuesto 2023, un 18 por ciento de las becas estaban destinadas a estudiantes de nivel superior no universitario y un 25 por ciento a universitarios. Es el 0,6 por ciento del presupuesto universitario.
La ampliación presupuestaria del 70 por ciento otorgada por el Ejecutivo en marzo para los gastos de funcionamiento de las universidades solo implicó un aumento del 2 por ciento en el gasto vigente en comparación con el presupuesto inicial. Durante el primer trimestre, el gobierno nacional ejecutó un 30 por ciento menos del gasto total en términos reales en comparación con el mismo período de 2023. Sin embargo, la reducción en las políticas universitarias fue aún mayor: alcanzó el 34,4 por ciento. Dentro de las partidas que conforman las políticas universitarias, la más importante, “Desarrollo de la Educación Superior”, experimentó una disminución del 32,9 por ciento.
Lo ejecutado en Becas Progresar sufrió una caída del 46,9 pñor ciento, mientras que lo destinado a la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria disminuyó un 18,4. Los programas de infraestructura universitaria prácticamente no tuvieron ejecución. Las transferencias a hospitales universitarios experimentan una caída del 72 por ciento, mientras que el Fondo Universitario para el Desarrollo Regional, al igual que los institutos tecnológicos de formación profesional y el desarrollo de proyectos especiales, no reciben asignación alguna.
