Por Sofía Ceballos

En un clima de intensa tensión, represión y con la detención de opositores, entre ellos activistas y periodistas, hace ya más de un mes que los ciudadanos venezolanos votaron para decidir quién gobernará durante los próximos seis años. 

En la tarde del 28 de agosto, el chavismo y la oposición se manifestaron nuevamente en las calles de Venezuela. La líder opositora, María Corina Machado, convocó a una movilización masiva en su país y en el mundo para defender lo que para ellos es el verdadero resultado de las elecciones: el triunfo de Edmundo González Urrutia. Machado incentivó en un video en sus redes sociales a asistir a la protesta bajo la consigna “Acta mata sentencia”, criticando al Tribunal Superior de Justicia, que convalidó los resultados del Consejo Nacional Electoral. 

Desde el 28 de julio, Venezuela quedó bajo un clima tenso. Ángel, quien no quiso dar su apellido por seguridad, es un médico veterinario venezolano que actualmente vive en Caracas, y cuenta cómo son los días poselecciones en la capital: “La gente estaba con miedo al conflicto poselectoral, se encontraban con miedo al roce, al tener contacto directamente con las autoridades, miedo a la reacción violenta de grupos, tanto del oficialismo, como también de la oposición. He notado que en los últimos días estas conductas fueron disminuyendo. Pero como caraqueños estamos acostumbrados a que esto ocurra cada vez que hay manifestaciones. Se ve más claro este tipo de enfrentamientos por parte del oficialismo”. Y agregó: “Siento que nos tocan años muy difíciles, pero tengo la certeza de que la situación va a cambiar, va a llegar un cambio para nuestro país“.

Los presidentes Lula da Silva, de Brasil, y Gustavo Petro, de Colombia, propusieron que Venezuela convoque a nuevas elecciones. El gobierno de Nicolás Maduro, autoproclamado ganador, no dio opinión al respecto. La oposición rechazó la propuesta de plano, porque asegura que los resultados del 28 de julio convierten a Urrutia en el nuevo presidente.

¿QUÉ LE CONVIENE HACER A MADURO? 

Nicolás Maduro no quiere dejar el poder. Para el chavismo, explica el periodista Gonzalo Báñez, no existe esa opción: “No hay otra alternativa para él. Eso no le hace pensar qué le conviene hacer, simplemente le hace pensar en qué herramientas necesita para sostener el país que actualmente tiene. No hay una estrategia de pensar qué le puede llegar a convenir a Nicolás Maduro de acá en adelante. Simplemente, hay una estrategia en desplegar distintas opciones para a través de esos canales lograr su objetivo de seguir en el poder. Hoy por hoy, esas estrategias son la persecución, la detención arbitraria, sembrar el miedo, el terror, la persecución o la inhabilitación de líderes políticos y el fraude mismo de las elecciones”.

Mientras tanto, millones de venezolanos siguen esperando un cambio en su país.