Por Mía Baldi, Martina Fernández Souto y Candela Morinelli
Luego de más de once años de espera y cuatro meses de audiencias, el caso Luna, de abuso sexual en la niñez, llega a la instancia del veredicto. Este martes 21 de noviembre se dará a conocer el fallo del Tribunal Oral 15 de la Capital Federal. La Fiscalía pidió que se condene al imputado, Hernán González Rizzi, padre de la víctima, por el delito de “abuso sexual gravemente ultrajante”, sancionado en el Código Penal con una pena de ocho a veinte años de prisión. La instancia judicial llega después de una larga lucha judicial de Luna y de su madre protectora, Yamila “Yama” Corín. Los hechos ocurrieron cuando Luna tenía entre 6 y 9 años. La víctima tiene hoy 21 años.
La audiencia comenzará el martes próximo a las 13 y el imputado podrá decir sus “últimas palabras” antes de escuchar la sentencia. Hasta hoy, González Rizzi, que sigue el juicio por Zoom, ha negado la existencia del gravísimo delito que se le imputa.
Mientras la Fiscalía solicitó una condena que puede llegar a los veinte años, la parte querellante que representa a la víctima y a su madre pidió condena por el delito de abuso sexual con acceso carnal, con una pena de seis a quince años, o en su defecto la pena de abuso simple, con cuatro a seis, sumado al de corrupción de menores, con tres a diez años de prisión. La defensa, por su parte, pidió la absolución del imputado “por inexistencia de los hechos”.
Hernán González Rizzi declaró durante las audiencias de manera virtual ante el Tribunal Oral Criminal N° 15. Rizzi negó los hechos, puesto que mantiene su postura de que todo fue “un invento para perjudicarlo”. Llegó a decir que a su hija “le contaminaron la memoria”. En su favor solo declararon testigos de concepto que intentaron mostrar a la mamá de Luna como una especie de monstruo y a él como un buen padre.
Yama, la mamá de Luna, detectó signos de un posible abuso hacia su hija por parte de su progenitor luego de consultar con una terapeuta, ya que la niña describía con claridad lo que le estaba pasando. La madre encontró dibujos eróticos con la recurrente figura de un hombre con pelo largo y rulos como tenía el padre de Luna. A los 13 años Luna escribió una carta contando todo lo que había vivido entre los 6 y los 9, durante los fines de semana que pasaba en el monoambiente paterno.
Luna con su madre presentaron la denuncia en abril de 2012 en el partido de Morón y luego la causa se tramitó en la Capital Federal, donde llegaron a la etapa de juicio recién el 8 de agosto de este año. Durante las audiencias, declararon los testigos de la Fiscalía, la querella y los convocados por la defensa. “Lo más importante en este tipo de casos siempre es el relato de la víctima, y tanto Luna como su mamá Yama fueron muy contundentes a la hora de relatar cómo habían sido los hechos”, expresó a Diario Publicable Marina González, la abogada de Luna. Además, se presentaron las declaraciones del perito oficial del Departamento Judicial de Morón, los peritos de parte y las conclusiones de varias psicólogas que asistieron a Luna durante todo este tiempo.
En relación con las pruebas, Marina González explicó que hicieron un análisis previo al comienzo del juicio y desde ese momento identificaron algunas pruebas que no eran favorables para Luna ya que incluían informes sobre la denunciante y una intervención del Ministerio Público Tutelar. La abogada sostuvo que esos informes “se basaron en criterios que reflejaban estereotipos de género y se relacionaban con teorías como el falso síndrome de delincuencia parental”. Esta situación es común en casos similares, donde se busca culpabilizar a las madres protectoras y a los profesionales involucrados en el cuidado y tratamiento de niñas y niños víctimas de abuso sexual.
Durante todo el juicio, que se realiza en Lavalle 1171, a metros del Palacio de Tribunales, Luna y Yama fueron acompañadas en forma permanente por colectivos feministas. Las organizadoras son las militantes de la Agrupación Mundanas, con el apoyo del Ministerio de Mujeres, Género y Diversidad, organizaciones políticas, feministas, sindicales y de derechos humanos. En algunas audiencias estuvieron presentes la secretaria nacional de Niñez, Ayelén Mazzina; el secretario nacional de Niñez, Adolescencia y Familia, Gabriel Lerner; la subsecretaria de Políticas de Diversidad, Agustina Ponce; la diputada nacional Mónica Macha, y María Perceval, representante especial para la Política Exterior Feminista.
Otras personalidades que estuvieron presentes fueron María Elena Naddeo, directora de Niñez, Adolescencia, Género y Diversidad del Pueblo de CABA; el ex juez federal Carlos Rozanski; Liliana Hendel, secretaria de Mujer y Géneros de La Matanza; la diputada Victoria Montenegro, y Nelly Minyersky, de la Campaña Nacional por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito.