Por Natalia Villarruel
La penetración de la radio en formato digital en Argentina aumentó en los últimos dos años un 22 por ciento, mientras que en el caso del podcast el crecimiento fue del 8 por ciento, según el informe de la consultora Havas. Si bien la radio tradicional también tuvo una recuperación del encendido en ese tiempo, los números más llamativos llegan con la incursión de los nuevos formatos de audio digital, que logró instalarse con gran velocidad.
Guido Corallo, productor y fundador de la radio y productora de podcast “Congo”, sostiene que estas nuevas formas de escucha vienen a complementar y generar mayor audiencia para la radio tradicional: “Hay muchos programas que se emiten en radio a los que el público fue descubriendo porque tenían desgloses en podcast. Eso, además, genera la posibilidad de réplica que también aumenta las reproducciones”.
Además, explica que esta retroalimentación se da porque los públicos son distintos: “La audiencia del podcast es una audiencia que para elegirte sigue muchos pasos para llegar hasta vos: abrir una aplicación, buscar el contenido que quiere escuchar, darle play y gustarle”.
Vale resaltar que la Argentina es un país con una audiencia muy radial y en la que este consumo está instalado como costumbre y rutina. Corallo analiza: “La radio nunca se va a perder porque siempre va a estar el oyente que está en la calle, en un transporte público o trabajando, que necesita escucharla mientras está haciendo otras cosas. La capacidad de compañía que tiene y la interacción con el oyente es la que la hace perdurar en el tiempo”.
La posibilidad de escuchar cuando el consumidor lo desea y la necesidad de utilizar ciertos dispositivos que requieren los podcasts marcan una diferencia con la radio tradicional y suman a un público no tan afín a ese medio. El productor opina que el streaming de video de programas de radio en vivo es un nuevo recurso que responde a una necesidad del público en un momento de alta demanda visual.
“La transmisión de la radio tradicional por streaming es una consecuencia del avance de un montón de plataformas que empiezan a encontrar un cauce en común, que es el hecho de comunicar todo lo que el comunicador quiere. Antes la radio solamente nos libraba a la magia de imaginar qué era lo que estaba pasando en ese estudio, y hoy lo podemos ver. Atrae audiencia ya que suma oyentes que quieren escuchar y también ver”, concluye Corallo.
