Por Fernando Fourcade

Teresa Torralva es presidenta, directora ejecutiva y una de las fundadoras del Instituto de Neurología Cognitiva de Bueno Aires (INECO) junto al Dr. Facundo Manes. Psicóloga, doctora en medicina y especialista en neuropsicología, se dedicó a estudiar la relación entre el cerebro y la conducta con sus distintas funciones ejecutivas como la memoria o el lenguaje.

Egresó de la Universidad de Belgrano en 1993, fue profesora de la cátedra de Neurociencias de la Universidad Católica Argentina (UCA) y, actualmente dicta neurociencias, neuropsicología y rehabilitación cognitiva en las carreras de grado y posgrado de la Universidad Favaloro. En 2015, obtuvo su doctorado en medicina. 

Torralva afirma que el proceso vivido por la pandemia y la cuarentena “presentó altibajos emocionales y fatiga mental por utilizar tantos recursos nuevos: cada uno debió utilizar sus propios medios para poder sobrellevar esto de la mejor manera posible en sus vínculos personales y relaciones interpersonales y ha sido un estrés sostenido por mucho tiempo”. Por eso, como idea, propone aprovechar el aprendizaje cuando todo termine.

Tres propuestas pospandemia

* Por el aislamiento, pudimos atender a personas que no contaban con los medios necesarios o tiempo para acercarse a centros especializados por lo que, de alguna manera, hemos globalizado la práctica neuropsicológica. Sería deseable seguir trabajando en esa dirección en la pospandemia.

* Más allá de la valoración de los vínculos y la sobrevaloración de la conexión vía la tecnología, fundamental para pasar la cuarentena relacionados o vinculados, no bastó, por lo que las relaciones directas o cara a cara y los vínculos afectivos profundos cobrarán un rol principal pospandemia.

* Nos transformamos en una comunidad más resiliente, con personas más resilientes, en las que importa el otro y hay necesidad de modificar objetivos pasados en post de nuevos con proyectos y propósitos para vivir mejor.