Por Imanol Lostra Kolb
En noviembre de 2019, Chris Martin, líder de Coldplay, anunció que la banda británica no daría más conciertos hasta poder reducir el daño ambiental que provocaban sus giras. El 14 de octubre de 2021, anunció su séptima gira mundial, “Music of the Spheres Tour”, que marcó el regreso del grupo luego de la pandemia.
La gira, que comenzó en Costa Rica, terminará en 2023 y recorrerá toda Europa y América, y convertirá a la banda en la primera a nivel mundial en establecer una estrategia completa de sostenibilidad. Para los diez shows en Buenos Aires, se espera una gran transformación del estadio Monumental para poder cumplir con esta meta.
Las propuestas incorporadas tienen como principal objetivo reducir un 50 por ciento las emisiones de dióxido de carbono con respecto a giras anteriores. Por otra parte, y como vienen haciendo hace años, donarán el 10 por ciento de sus ingresos para apoyar a organizaciones ambientalistas y humanitarias, y se comprometieron a plantar un árbol por cada ticket vendido. Teniendo en cuenta la logística del transporte, se minimizaron los vuelos privados y toda la banda y producción se traslada en aviones comerciales. Por otro lado, para el armado del escenario se priorizaron los materiales naturales y locales, como estructuras de bambú y otros recursos renovables. Las pulseras LED para los espectadores ahora son reutilizables, y el papel picado es biodegradable.
PARTICIPACIÓN DEL PÚBLICO
La energía que posibilita el show es enteramente renovable: se utilizan las baterías BMW i3s, que funcionan recargándose con energía generada por el público mediante pisos cinéticos y bicicletas eléctricas. Otra de las propuestas es premiar a los fanáticos que reduzcan su huella de carbono al momento de ir al show, ya sea por compartir vehículos o por ir en bicicleta. Además, hay agua potable gratuita para que el público recargue sus botellas reutilizables y no utilice descartables de plástico, y todo el merchandising es 100 por ciento libre de plástico. Para comer, hay alternativas veganas y vegetarianas, productos locales de cada país y carne sintética.
Además de sustentable, la gira es inclusiva. Por eso, en cada espectáculo habrá intérpretes de lengua de señas, para que aquellos que padezcan alguna deficiencia de audición puedan disfrutar de las letras de las canciones como el resto del público.
CUÁNTO CONTAMINA UN RECITAL
La música en vivo genera alrededor de 670 mil toneladas de dióxido de carbono por año, lo que significa que por cada persona que asiste a un concierto se generan 5 kilos de CO2.
En el recital, las emisiones representan un 34 por ciento, y se derivan del consumo de energía de las redes eléctricas (la iluminación, el sonido) y del consumo de combustible en generadores de energía, los vehículos a motor del staff, la banda, entre otras cosas. En el caso del público, los viajes hasta el predio representan otro 33 por ciento de la contaminación. Además, también se tienen en cuenta la producción de mercancía, el alojamiento en hoteles, los viajes de las bandas y la promoción 2 por ciento.
Edición: Eugenia Arribas y Leticia Arieta
