Por Emma Coria Maiorano, Ámbar De Elía y Juana Ortmann
“Amo la sala de cine, me da la sensación de que las películas en una butaca se disfrutan de una manera única e irrepetible”, dice el director Juan Baldana, responsable de la serie documental deportiva de Netflix “Sean Eternos: Campeones de América”. Pero el cine fue uno de los sectores más perjudicados por la pandemia, generando una crisis que la explosión simultánea de las plataformas de streaming complica aún más. No por nada en el primer bimestre de este año los espectadores cayeron un 50 por ciento en comparación con 2019, según las estadísticas de la consultora Ultracine.
Otro síntoma del golpe es lo ocurrido con los cines Multiplex y General Paz, del barrio de Belgrano, que debieron cerrar porque no pudieron recuperar su público habitual. “Los dueños de las grandes cadenas o distribuidoras ven al cine como un negocio. Quizás antes había amantes del cine que eran distribuidores, pero hoy un distribuidor tiene un cine como tiene un supermercado; entonces, no le importa si se dejan de ver películas”, analiza Baldana sobre los cines independientes.
Sobre la serie documental que retrata a la selección argentina en la Copa América de 2021 Baldana cuenta sorprendido que en tan sólo cuatro días del lanzamiento en Netflix logró un alcance enorme. Esta es la carta principal de las plataformas de streaming: lograr gran repercusión estrenando una serie o película en todo el mundo al mismo tiempo con la ventaja de la accesibilidad y la facilidad, es decir, con el espectador pudiendo elegir cuándo o cómo verlas sin planificarlo con antelación.
“Con la llegada de las plataformas cambió el modelo de financiar las películas, porque antes producían desde los institutos nacionales de cine hasta fondos privados, que podían venir de cualquier persona”, explica el director Martino Zaidelis (“Re Loca”). Ahora, en cambio existe una cantidad importante de películas financiadas íntegramente por las plataformas, por lo que tienen el poder de intervenir en el proyecto y modificar desde el guión hasta el corte final: “Quien pone la plata tiene más poder”.
“Las plataformas generaron un gran cambio en la manera de hacer y ver cine”, expresa Zaidelis. La transformación en el mundo del séptimo arte no está llegando porque ya está aquí: las plataformas se multiplican y las salas nacionales cierran. “Nos tenemos que acostumbrar a los nuevos cambios pero sin renunciar a los cines”, concluye Baldana.
EL FENÓMENO “ARGENTINA, 1985”
“Sabíamos que la decisión de Prime Video generaría ruido en las grandes cadenas de cine”, contó el periodista Axel Kuschevatzky, productor de “Argentina, 1985”. La película llenó salas y volvió a generar furor por el cine. Las grandes cadenas decidieron no proyectarla, pero no fue una traba, ya que con un millón de entradas vendidas es la producción local con más público desde el inicio de la pandemia.
“Las personas que no podían ir a las grandes cadenas fueron a otro cine”, explicó Kuschevatzky, poniendo en evidencia que la decisión de las grandes cadenas no afectó la repercusión de la película. Después de tres semanas en salas, “Argentina, 1985” se estrenó en Amazon Prime Video, una plataforma con llegada a 240 países y territorios.
UNA RELACIÓN MÁGICA
“Tuvimos la suerte de que en el viaje nos acompañó Daddy D´Andrea, el masajista histórico de la selección desde 1998. Es mucho más que un masajista y los jugadores de la selección tienen una confianza increíble con él, así que entrar a su casa permitió que se abrieran las puertas de todo”, cuenta Baldana sobre “Sean Eternos: Campeones de América”.
Desde el estreno, las redes sociales explotaron remarcando la emoción que generó la serie. Baldana lo sabe: “Se creó un amor incondicional con la selección, el documental terminó de ayudar a ese idilio que comenzó hace muy poco entre el hincha argentino y los jugadores”. Para el director, el éxito se debe a que el equipo de Messi genera una sensación única, que nada ni nadie puede generar.