Por P. Setrini, F. Chapeta, J. Kritzer y D. Galarza
Mujeres de distintas generaciones como la cantante de tangos Adriana Varela, la diputada nacional por el Frente Amplio Progresista Victoria Donda y la comediante Malena Pichot coincidieron en que el personaje de Mafalda supo reflexionar desde el humor gráfico argentino acerca de distintas temáticas de derechos humanos, entre ellas, el rol femenino en la sociedad.
Para Varela, la tira de Quino logró reflejar los nuevos movimientos feministas poniendo en jaque a personajes como la madre de Mafalda, Raquel, cuestionándola sin desvalorizar su identidad. “Mafalda hace aporte a todo pero, más que al feminismo, a la identidad femenina, a cuestionar para qué estamos las mujeres en este mundo y cómo hay que fracturarse para romper con el machismo”, afirmó la cantante.
“Casi podría decir que Mafalda fue una adelantada en las reivindicaciones de género”, explicó Donda, quien no dudó en identificarse con el “inconformismo permanente con las cuestiones político-sociales” de la protagonista de la tira. Asimismo, agregó que Mafalda empujó a mujeres de diversas generaciones a ubicarse en un rol más preponderante en la sociedad.
Para Pichot, Mafalda es un personaje que cuestiona muchas cosas de la sociedad. “Desde ese lado hace un aporte a cualquier movimiento que quiera reorganizar un orden establecido”, apuntó. Sin embargo, por negativa, el personaje de Susanita también generó conciencia. “Cuando alguien habla de una mujer que sólo quiere casarse y tener hijos ahí sale la imagen de Susanita y eso es muy fuerte en ese sentido”, aclaró la humorista. “Recuerdo que me caía muy mal.”
A pesar de ser sólo una niña, Mafalda fue la vocera de infinitos cuestionamientos acerca de los derechos humanos. “Era una especie de descarga impresionante, sobre todo en épocas en las que no había democracia”, afirmó Varela. Donda, por su parte, confesó: “Es una lástima que Quino no nos haya mostrado su crecimiento. Nos quedamos con las ganas”