Por María Florencia Quarenta @nomaderev
“Se puede hacer periodismo de investigación desde las redes sociales”, opinó el periodista Juan Amorín en la charla “De los márgenes al mainstream: cómo hicimos crecer la historia de los aportes truchos” que dio ayer en Ciudad Cultural Konex en el marco de la Media Party, un evento que reúne por tres días a emprendedores, periodistas y programadores de software del mundo para analizar el futuro de los medios de comunicación.
Según Amorín, la investigación sobre más de 200 casos de personas pobres que aparecen financiando la última campaña de Cambiemos en Buenos Aires “nació en El Destape, un medio digital que nació en 2014 y hoy ya tiene más de un millón de likes en redes sociales”. Además, el periodista destaca que todo terminó siendo un trabajo “colectivo” gracias al compromiso de la gente que aportó pruebas.
Al ser una investigación iniciada en un sitio web, Amorín debió enfrentarse a tres grandes desafíos. “El primero fue la grieta”, reconoce el periodista, “porque hoy los análisis se hacen según el medio que las publica y no la persona”. En ese sentido, señala que “El Destape es un medio opositor, pero lo que importan son los hechos, la documentación, los testimonios y las respuestas de los principales actores”.
Por otro lado, Amorín habló sobre qué significa estar en un canal de YouTube. “Estuvimos en la televisión hasta septiembre de 2017. Teníamos un nivel de masividad que nos permitía que la sociedad se enterara de lo que acontencía; ahora es más difícil”, explica.
Amorín sobre la reinvención de El Destape (Entrevista: Marilina Pacheco)
Amorín hizo hincapié en los personajes involucrados, como “la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, quien tenía una imagen positiva del 62 por ciento”, lo que dificultaba más que el caso llegara a los grandes medios.
“Teníamos la necesidad de cerrar la grieta entre los colegas y de interpelar a la gente. La noticia terminó apareciendo en medios como La Nación, Chequeado y Perfil. Eso le dióoimpulso y veracidad a la investigación“, observa Amorín, quien también considera que la difusión a través de las redes sociales fue decisiva.
Al respecto, el periodista de El Destape remarca que “los funcionarios ignoraron la investigación porque provenía de internet, de un medio opositor y porque nunca iba a llegar a los diarios”. Y añade: “Cuando vieron que a la gente le preocupaba el tema -la campaña que invitó a usuarios de Twitter a interpelar a los políticos de Cambiemos fue tendencia mundial en junio pasado-, Vidal le pidió la renuncia a su contadora”.
Para Amorín, el equipo de El Destape fue echado de la televisión, pero de ese modo los expulsaron “hacia el futuro de lo que son las investigaciones periodísticas surgidas en Internet y que pueden llegar a marcar agenda”. Concluyó: “No existe el blindaje mediático cuando se usan las herramientas con inteligencia y se hace partícipe a los usuarios de redes sociales”.