Por G.Roncoroni, S. Pozzi, A. Silva, A. Nápoli y M.del R. Maldonado

El primero en declarar hoy fue el ingeniero civil José Leonardo Astelarra, quien relató que su hija embarazada, María Patricia Astelarra y uno de sus hijos, habían sido detenidos por el Tercer Cuerpo de Ejército. Ella estuvo detenida desde julio de 1976 hasta marzo de 1977. Su hermano permanece desaparecido desde noviembre de 1976.

“Fui objeto de una extorsión”, afirmó Astelarra. Le dijeron que su hija estaba en poder de los Montoneros y le pidieron un rescate de 80 mil dólares. Terminó pagando 10 mil dólares y su hija no apareció. Más adelante, se enteró que había estado detenida en la cárcel del Buen Pastor de Córdoba. Había llegado a ese lugar desde La Perla. María tuvo a su hijo en la maternidad de Córdoba y estuvo con él dos meses aproximadamente hasta que entregaron el bebé a sus padres. Estuvo detenida hasta marzo de ese año.

Por su parte, el teniente coronel Guillermo Genta, a quien Astelarra dijo considerar “un amigo”, declaró en el juicio que investigó el caso de la hija y la extorsión pero nunca obtuvo una respuesta. Genta, por su parte, negó ser “amigo” de Astelarra: “Solo un muy fugaz conocimiento”, afirmó el militar, quien sí reconoció, en cambio, ser amigo de los generales Jorge Rafael Videla y Roberto Eduardo Viola.

A continuación, declaró Olga Cortés de Salamanca, esposa del secretario general de la seccional Córdoba de Smata René Rufino Salamanca., quien aseguró:“El capitán Ferreyra me dijo en el Ministerio del Interior que mi marido estaba con vida”. Salamanca fue detenido en su casa, en un operativo del Ejército. La mujer hizo averiguaciones en el Ministerio del Interior, el 4 de octubre de 1976; el capitán Ferreyra le dijo que su marido estaba con vida. En 1977 le confirmaron, desde el exterior, que seguía con vida y por medio de la detenida Graciela Geuna se supo que lo tuvieron en La Perla. Nunca más volvió a ver a su esposo.

Luego declaró Elsa Margarita Elgoyhen, quien fue detenida junto a su marido César Roberto Soria el 11 de noviembre de 1976 en Córdoba. Quedó a disposición del Tercer Cuerpo de Ejército, del área 311, durante casi dos años. En junio de 1977, nació su hija Daniela, que fue retirada cinco días después por su familia. En octubre de 1978 fue trasladada a la Unidad 2 de Devoto, en la Capital Federal. El 23 de junio de 1982, recibió la libertad vigilada. Se enteró que su marido murió por un recorte de diario del 14 de diciembre de 1976.

El médico Raúl Orlando Acosta estuvo detenido desde el 26 de mayo hasta el 24 de diciembre de 1976. El trabajaba en el Hospital Santa María. Lo llevaron a Cosquín y luego al campo militar La Ribera, donde socorrió a los detenidos Cesar Soria y a Ana María Mohaded. Había sido interrogado previamente por tenencia de armas de guerra, por participar de una “cárcel del pueblo”, que eran pozos creados para mantener cautivos a militares, y por mantener económicamente a presuntos “terroristas”. En La Ribera se encontró con su esposa Nélida Esther Marchese, quien dio a luz en cautiverio en la Maternidad Provincial.

Ana María Mohaded: seis años en seis centros de detención

El último testimonio fue el de Ana María Mohaded, secuestrada el 11 de noviembre de 1976. Pasó primero por La Perla, luego por el Campo de la Ribera, la Cárcel Penitenciaria, el “D-2” de la Policía Federal en Cabildo, la “Perla Chica” en Malagueño y en última instancia, en la ex cárcel de mujeres “Buen Pastor”, donde fue liberada el 16 de noviembre de 1982. Fue sometida a torturas con picana mientras le preguntaban si conocía algún “zurdo”.

Ana María Mohaded declara frente al Tribunal.

Tróccoli recibió a las Madres de Plaza de Mayo

El Ministro del Interior, Antonio Tróccoli, dialogó con las Madres de Plaza de Mayo, luego de que pasaran toda la noche en la Casa Rosada para reclamar una reunión con el presidente Raúl Alfonsín. También participó del encuentro el Subsecretario de Derechos Humanos, Eduardo Rabossi.