Por Belén Marchese

Desde el retorno de la democracia, el comportamiento electoral de los votantes de Chaco se caracterizó por mostrar una tendencia cambiante, que osciló entre el peronismo, el conservadurismo y el radicalismo. Son tres los partidos provinciales que, en distinta medida, lograron consolidarse y organizarse para presentar candidatos, aunque la mayoría no tuvo la posibilidad de acceder a una gobernación. Sin embargo, por medio de alianzas con los partidos nacionales, algunos nombres todavía siguen sonando en la escena política norteña.

El primero, Acción Chaqueña, es un partido conservador fundado en 1988 por José Ruiz Palacios, ex viceministro del Interior de la dictadura y brazo derecho del genocida Albano Harguindeguy. Entre 1991 y 1995, lograron que Rolando Tauguinas ganara la elección y se consagrara gobernador representando al partido. Para la elección de 1995, debido al descontento con las políticas de ajuste y las privatizaciones, sumado a las disputas entre Tauguinas y Palacios, el partido cayó al tercer puesto y entró en un declive del que no se recuperó.

Según el escritor y periodista Mempo Giardinelli, “el mandato de Rolando Tauguinas fue absolutamente negativo. Era el representante de la dictadura. Simbolizaba el autoritarismo y la negación de la democracia en la provincia del Chaco”. A su vez, aclara que si bien tuvo seguidores, y muchos más que los esperables, el fracaso político y la desaparición posterior son la prueba de su oportunismo. Por último, sobre el objetivo que se perseguía al formar el partido, señala: “Blanquearse y pasar por democrático después de la dictadura”.

En las elecciones de 2003, Acción Chaqueña formó parte del Frente de Todos llevando al radical Roy Nikisch a la gobernación. En los comicios de 2011, dejó ese frente y participó sólo para la elección de diputados provinciales. Desde 2015, pertenece al Frente Chaco Merece Más junto con el Partido Justicialista, cuyo candidato Domingo Peppo triunfó en esa ocasión y gobierna en la actualidad.

El segundo partido provincial destacable es el Partido Socialista del Chaco. Si bien jamás consiguió que sus candidatos lograran acceder a una gobernación, su presidente, Eduardo Siri, es también presidente del Concejo Municipal de Resistencia. Luego de décadas de existencia como fuerza provincial, se incorporó finalmente a la estructura nacional del Partido Socialista. En abril de 2017, conformó la Alianza Electoral Transitoria Progresista junto con el frente Libres del Sur. Para las elecciones nacionales de este año se sumó a Consenso 2030, el espacio liderado por Roberto Lavagna y Juan Manuel Urtubey.

El Partido Socialista Unidos por el Chaco es la tercera fuerza provincial que adquirió cierta relevancia. Su presidente, Emerenciano Sena, se presenta a sí mismo en un jingle como: “Es una magia, no es una fantasía”. Opositor a la legalización del aborto, usó una imagen suya con el Papa para apuntalar su campaña electoral como diputado provincial, así como también una bandera con su nombre y la imagen del Che Guevara.

“El viejo Partido Socialista tenía un vínculo sólido con la trayectoria de Alfredo Palacios y con las tradiciones históricas argentinas. Éste, que yo sepa, no. No se es socialista por el sólo nombre de un emprendimiento político”, asegura Mempo Giardinelli refiriéndose a esta fuerza de nacimiento relativamente reciente. Para las elecciones 2019 el partido se presenta junto a otras quince agrupaciones ante la Justicia Electoral como Frente Patriótico, ratificando su alineamiento y respaldo a la fórmula presidencial encabezada por Alberto Fernández con Cristina Fernández de Kirchner como vice.

Sin favoritos históricos y con una tendencia clara hacia la variabilidad, el electorado chaqueño encontró en cada elección nuevas oportunidades, y puso casi toda su esperanza en los candidatos de los partidos nacionales. Sin embargo, en los cuatro años en los que Rolando Tauguinas gobernó, se le dio la chance a una propuesta provincial, que luego quedó desplazada por el radicalismo. Más allá de esto, el conservadurismo y las ideas de derecha siguen vigentes, a pesar de que cambien los partidos o los representantes.

Foto: Legislatura del Chaco