Por Micaela Merlo Ayala
Parado en medio del depósito de materiales para la construcción que levantaron sus bisabuelos hace 50 años, Lautaro González se preguntó qué hacer para sobrevivir a la pandemia del coronavirus. Su saludable costumbre de entrenar le dio la respuesta y comenzó a fabricar elementos para hacer ejercicio en casa: bancos de hierro forrados en cuero sintético, elementos para amurar en paredes, mancuernas porta discos, entre muchos otros que fue creando y soldando.
Desde el galpón ubicado en la localidad de Lanús salían diariamente caños, chapas y rejas. El negocio que comenzó hace medio siglo se mantuvo como un proyecto familiar que fue perdurando de generación en generación, pero la falta de actividad por la cuarentena, como en muchas otras pequeñas empresas, hizo que los ingresos comenzaran a disminuir, mientras que los impuestos se mantuvieron iguales.
Con la misma materia prima que comercializan, las maquinarias con las que cuentan en su depósito y la ayuda de uno de sus empleados, González creó “Home Fitness Lanús”. El equipo se divide las tareas: unos cortan el hierro, otros sueldan y otros forran con cuero sintético y goma espuma, etc.
“Las más perjudicadas en este proceso son las pymes, ya que gran parte de las ventas que antes fluían normalmente bajaron, pero confiamos y esperamos que la economía vuelva a levantar“, se esperanza el joven empresario, que pudo reabrir su depósito, con horario limitado y reducción de personal.
Su primera creación fue un banco de hierro igual al que utiliza en el gimnasio para usar en su casa y sus amigos comenzaron a hacerle pedidos. “Todo empezó como una broma y creció con el boca en boca”, cuenta. Poco a poco se fue haciendo conocido en su barrio y actualmente, en su página en Instagram, expone el catálogo de mercadería y maneja las entregas realizando envíos a domicilio por correo dentro de todo el país. El depósito sigue funcionando como proveedor de materiales si bien las ventas han bajado a gran escala y Home Fitness nació como un complemento para subsistir en tiempos de cuarentena.