Por J. M. Boarini, T. Holcman, J. Landau y E. Lazo
Alberto Fernández reanudó su campaña electoral tras la contundente victoria en las PASO con una visita a España y Portugal el 6 de septiembre, además de un viaje a México el 19 del mismo mes. Esto marca un giro radical en el estilo federal que lo llevó a la victoria el 11 de agosto. Pero, ¿cuál fue el mensaje que dio en cada una de las provincias en las que se presentó para que el triunfo en las PASO sea visto como “casi definitivo”?
El primer lugar que visitó Alberto Fernández luego de conocerse su candidatura fue Santa Cruz, territorio vinculado históricamente al kirchnerismo y donde sus candidatos siempre son bien recibidos. En esa visita Fernández se reunió con la gobernadora Alicia Kirchner y, según se dio a conocer, conversaron acerca de la situación actual de la provincia. A su vez, aprovechó su estadía para visitar el mausoleo donde yacen los restos de Néstor Kirchner.
La situación en San Juan fue similar, ya que se reunió con el gobernador Sergio Uñac y el titular del PJ, José Luis Gioja. También dio una conferencia de prensa en la cual aseguró que “a Cristina Kirchner nadie la va a condenar” y que quiere una Justicia que sea propia de un estado de derecho.
En Catamarca, Tucumán y La Rioja intentó transmitir un mensaje similar, ya que en todos los actos en esas provincias remarcó la necesidad de fomentar el federalismo y el mercado interno. “Lo que pasa en La Rioja no es muy distinto que lo que pasa en Catamarca o Tucumán. Hay un común denominador en el tema industrial, por ejemplo en el sector textil, que es la apertura de importaciones que terminaron liquidando empresas”, sostuvo.
En Santa Fe se reunió con el gobernador Omar Perotti y, juntos, brindaron una conferencia de prensa. El para entonces precandidato por el Frente de Todos aseguró que con él “se terminó la grieta” y que “la salida de la crisis es con producción y trabajo”. También le dedicó unas palabras al gobierno del presidente Macri diciendo que apagó la economía: “Vivimos en una Argentina concentrada que le hace muy mal a las provincias. Con Omar (Perotti) lo hablamos mucho y él me dio una idea, que es ver provincia por provincia la firma de un compromiso para resolver estos problemas”, prometió
En Misiones se dio una situación particular, ya que Fabiola Yañez, la esposa de Fernández, visitó una pequeña comunidad del barrio “Las Ruinas”, en la ciudad de Apóstoles, donde se encargan de realizar una tarea de evangelización y contención a los niños necesitados. El pastor de esa comunidad, Sandro Gazan, contó que Yañez se mostró muy humilde y con intenciones de ver cómo estaban y qué necesitaban. Y remarcó que no hablaron de política.
En Entre Ríos brindó una conferencia de prensa junto al gobernador Gustavo Bordet y quienes eran precandidatos a senadores y diputados por el Frente de Todos. Allí declaró: “Podemos mentirle a la gente y decirle que la economía está tranquila porque el dólar está quieto. Digo estas cosas y ¿quién me responde? El Fondo. Yo lo critico a Macri y me responde el Fondo Monetario“. También aseguró que los productores no estarían liquidando la cosecha “porque todos saben que el dólar está subvaluado”.
La ciudad de Buenos Aires no quedó fuera de los actos del candidato pero tampoco se destacó con mucha presencia. En su única demostración junto al candidato a jefe de Gobierno porteño, Matías Lammens, dio un mensaje dirigido a los jóvenes: “Les pido que no dejen que los anestesien. Siempre discutan. Siempre debatan. Siempre, porque el futuro es de ustedes”.
Por otra parte, recorrió distintas ciudades de la provincia de Buenos Aires como Mar del Plata y Necochea, y partidos como Lomas de Zamora, La Matanza, Hurlingham o San Martín. Especialmente concentró su campaña en el conurbano, donde sus discursos se centraban en apoyar a las pymes, promover la educación pública y la ayuda a los jubilados. Además, aprovechó para reunirse con empresarios y comerciantes en todas las localidades en las que estuvo y enviar el mensaje de “encender la economía”. Esta estrategia fue muy positiva para el Frente de Todos, ya que en las PASO lograron hacerse con el 52 por ciento de los votos de la provincia.
Distinta fue la situación en Córdoba, punto clave para la victoria de Cambiemos en 2015, por lo que el Frente de Todos se centró particularmente en esta provincia para recuperar votos perdidos en la última elección presidencial. A pesar de no tener un éxito tan grande como en Buenos Aires, logró achicar la diferencia consiguiendo diez puntos más que en las elecciones pasadas.
Durante la campaña, Alberto Fernández fue cuatro veces a la provincia. Visitó al gobernador reelecto, Juan Schiaretti, en busca de su apoyo, pero finalmente la máxima autoridad provincial se decidió por una boleta corta. El candidato se interiorizó en “la pampa gringa” visitando ciudades como Marcos Juárez y General Deheza, lugares donde el apoyo al oficialismo es enorme. En su cierre en el Orfeo Superdomo reconoció que hubo una negligencia para con la provincia durante los mandatos de CFK.
Finalmente, en el cierre de campaña realizado en Rosario, expresó la necesidad de “unidad nacional para salir de la crisis” y gratitud hacia al pueblo argentino. Finalmente, enfatizó: “Sepan que saldremos del laberinto por la dignidad de pueblo argentino; lo hicimos una vez y lo volveremos hacer otra vez”.
Con esto, Alberto Fernández concluyó su campaña habiendo visitado 11 de los 24 distritos, centrando sus energías en los sitios que concentran mayor electorado como Santa Fe, Córdoba y Buenos Aires. Ahora quedará ver si para octubre repite su exitosa estrategia –ya que ganó en 22 de los distritos electorales– o se ocupa de visitar los lugares que aún no ha recorrido.
Fotos: @alferdez