Por M. Schefer, E. Malm Green, C. Risoleo, O.González Dama, F. Martinez, M. Grande
En tiempos de pandemia y cuarentena, quienes viven en departamento han comenzado a aprovechar -en muchos casos, todavía más- sus balcones, único espacio de conexión con el mundo exterior y la naturaleza. “El balcón es un intermediario entre la naturaleza y el interior del departamento, no hay que tomarlo como un depositario de macetas y tampoco que esté vacío, porque no sería un hogar”, advierte la paisajista Analia Pichetto, que les da un lugar importante a las plantas debido a que el verde aporta, en sus palabras, una sensación de “espiritualidad” y oxigena el ambiente.
“Las plantas tienen factores fundamentales: luz solar y su intensidad, la cantidad y frecuencia de riego, y la nutrición del suelo en la terrina”, explica la ingeniera agrónoma Mónica Durán, que también destaca la importancia del tamaño del balcón y cómo producir -al ingresar- un buen impacto visual. “Es un cambio total porque purifica el aire, aísla los ruidos y humecta la atmósfera”, advierte.
A la hora de elegir las plantas, hay que tener en cuenta el piso, ya que para cada altura hay una especie distinta. “Si tiene pocas horas de luz, son ideales las plantas de hoja ancha, como helechos, boinas de vasco y philodendron, y si tiene sol permanentemente podrían ser gramíneas, suculentas y especies con floración profusa como verbenas, salvias, dietes y rosas”, explica la paisajista Daniela Troncatti.
Por su lado, el ingeniero agrónomo Andrés Boly insiste en tener en cuenta en qué momento del día el balcón recibe luz y cuál es su orientación. “En lugares de altura pueden funcionar mejor los cactus mientras que los más bajos son aptos para una amplia diversidad, como la oreja de elefante, sansevieria, pennisetum rubra y las aromáticas”, dice.
Las suculentas están de moda al igual que los cactus y son ideales, según Pichetto, para quienes no van a dedicarle mucho tiempo al balcón, pero igualmente quieren tener un espacio verde. “Son muy fáciles de mantener y no hay que regar tan seguido”.
Débora Bianchi, diseñadora de interiores, agrega: “Las plantas cumplen un rol fundamental ya que nos ponen en un lugar de responsabilidad en su cuidado además de embellecer el pequeño y limitado paisaje”. Apuesta a los maceteros en fila, a los colgantes de cañas que proporcionan una sensación de calma y los jardines verticales construidos con un pallet colgado en la pared, que acercan un pequeño pedazo de la naturaleza.
Al elegir los elementos estéticos, Pichetto piensa en aquellos que complementen con el interior e inviten a estar en el balcón, como una mesa pequeña o hamaca, si tiene una estructura sólida. A su vez, Troncatti aconseja aprovechar las barandas y su verticalidad. Y apuesta también a sumar plantas dentro de la casa y elementos en el exterior, incluidos los vintage. “Un cuadro o espejo es un recurso poco usado, pero genera encanto”, dice. También, asegura que la iluminación artificial da calidez al lugar. “Los fanales, guirnaldas de luces o pinches solares destacan las plantas y además de decorar de día hacen que sea aprovechable de noche”.
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